Se acuerdan de Santa Bárbara cuando truena
Dice el refrán que sólo nos acordamos de Santa Bárbara cuando truena. Y a la izquierda le pasa algo parecido: sólo se acuerda de la Sanidad pública cuando se acercan elecciones.
El sector sanitario español está necesitado de mejoras urgentes: subida de sueldos, menos turnos, más médicos… Pero, ni el PSOE ni Podemos, ni tampoco Más Madrid, han movido un dedo al respecto en toda la legislatura.
Sin embargo ahora, cuando estamos a pocos meses de unos comicios municipales y autonómicos, hemos asistido a una multitudinaria manifestación en Madrid. Pero eso sí, sólo en la capital, donde la Sanidad está mucho mejor que en otras muchas comunidades. En aquellas autonomías gobernadas por la izquierda, donde el sector registra numerosas y notables deficiencias, ni una sola protesta.
Es algo habitual. Desde que el Partido Popular gobierna en Madrid, la izquierda, cuando se acercan las campañas electorales, entona la letanía de que la derecha pretende desmantelar el sistema público de Sanidad, negándose a reconocer que han sido muchos los hospitales construidos, los Centros de Atención Primaria puestos en marcha, y la reducción de las listas de espera.
Se trata de una maniobra para intentar socavar la popularidad de Isabel Díaz Ayuso que, según las encuestas, acaricia la mayoría absoluta con unos resultados aún mejores que los anteriores.
La presidenta de la Comunidad de Madrid se ha convertido en la bestia negra de la izquierda. Es una dirigente política que se ganó el apoyo popular con sus medidas para mantener en funcionamiento la economía durante los tiempos de pandemia, cuando en otras regiones, las limitaciones impuestas restringieron gravemente la actividad de comercios, autónomos, empresas y familias.
El propio Pedro Sánchez ha intentado, por todos los medios, perjudicar a los madrileños, en un intento de que los ciudadanos se rebelasen contra su presidenta. Pero no lo ha conseguido.
La izquierda sabe que no puede derrotar a Ayuso en las urnas, y, por eso, intenta hacerlo mediante algaradas callejeras. Que los ciudadanos se armen de paciencia. Vienen tiempos de movilización. Las pancartas y los megáfonos inundarán las calles, porque está tronando y la izquierda se acuerda de Santa Bárbara.