No puedo dejar de reconocer que quiénes gustamos de recorrer con asidua frecuencia los pueblos y parajes naturales de la bellísima Sierra Madrileña, siempre guardamos para nuestro adentro, algunos lugares a los que profesamos especial afecto por su encanto, por sus gentes, por sus paisajes, por su historia y, naturalmente, por su gastronomía. Pues hoy quiero confesarles que para mí, uno de estos pueblos con especial magia es Colmenar del Arroyo.

Ubicado en un paraje natural de excepcional belleza, Colmenar del Arroyo es un pueblo apacible, que desprende paz entre el transcurrir de las aguas que lo recorren, el aroma de flores y las fachadas de sus casas revestidas de piedra.

Además de todas estas circunstancias que a mi criterio hacen irresistible regresar una y otra vez a disfrutar de sus calles y plazas, en mi última visita, tuve la ocasión de hallar una nueva razón por la que volver, si cabe, con mayor frecuencia: la espléndida cocina del restaurante La Colmena.

A la altura del número 5 de la calle Real, Ramón Molina acaba de abrir las puertas de La Colmena, tras adecuar un renovado local, donde ofrece los mejores arroces, pescados, mariscos y carnes. Este prestigioso restaurador tiene fama de elaborar los arroces más sabrosos de Madrid y les puedo asegurar que tal fama está más que justificada.

Entre sus platos estrella, el pulpo a la brasa que ofrece en un estilo mar y montaña sobre un lecho de patatas a la gallega y con unas lochas de panceta crujiente, tostadas en su punto; también almejas en salsa marinera; pescados frescos a la parrilla o en salsa; verduras de temporada; arroces caldosos o melosos; cabrito y cochinillo asado; y los mejores guisos de cuchara.

Cada día de la semana se puede disfrutar de un puchero diferente: los lunes, lentejas estofadas con verduritas; los martes, guiso marinero; los miércoles, cocido completo; los jueves, fabada asturiana; y los viernes, menú especial con parrillada de marisco o arroz con bogavante. También ofrece platos para llevar.

Resulta totalmente imposible resistirse al aroma que desprende el arroz con bogavante y puedo afirmar que me sentí afortunado, mientras me deleitaba con su espectacular sabor. El arroz estaba en su punto, el bogavante exquisito y servido con generosidad, y el caldo intenso en todos sus matices. Además, en La Colmena, te dejan la cazuela sobre la mesa, para que se pueda repetir cuantas veces se quiera.

Excelente producto, magistral elaboración, trato exquisito al cliente y una buena bodega de vinos, esta es la carta de presentación del nuevo restaurante La Colmena. Mis mejores deseos y augurios para Ramón Molina, artífice de que a partir de ahora, mis visitas a Colmenar del Arroyo se produzcan, sin dudarlo, con mayor frecuencia.