Trabajando en un primer cuadro de Miguel Abellán arrancó el proyecto que María Rosa Arellano quiere seguir haciendo crecer para incorporar a él la presencia de los grandes toreros que, a juicio de la autora, no deben faltar en su pequeña gran Galería Taurina. Una singular y vistosa galería que tiene como curiosidad el estar bordada a mano. Y es que son muchas las puntadas que suman cada una de sus obras, mucha la dedicación y, sobre todo, la pasión por reflejar en ellas lo que Rosa ve en el toro, “arte, belleza, fuerza y pureza”. Porque el toreo a pie, en lances de figuras como José Tomás, El Juli y hasta Manolete, y también a caballo, recreando con el detalle que atesora su aguja el rejoneo de Diego Ventura o de Lea Vicens, da contenido a este curioso muestrario que ahora se presenta en coincidencia con la primera feria importante de la temporada, en el Museo Taurino del propio coso de La Candelaria.

La exposición, que precisamente se inaugura en plena festividad de San Blas, a las 14.15 h del sábado 3, podrá visitarse en horario de tarde, ya desde este primer fin de semana festivo, y la próxima semana, concretamente del 8 al 11 de febrero. Una ocasión única para mirar la tauromaquia a través del tesón de esta artista por transmitir el sentimiento que le inspira la fiesta y que espera que el público sienta también al descubrir sus creaciones, realizadas en diferentes formatos pero con el denominador común de hilar afición y arte en piezas realmente únicas.