La alcaldesa de El Álamo, Natalia Quintana, y el primer teniente de alcalde, Juan Carlos Orgaz, han emitido un comunicado que firman de forma conjunta, para aclarar la polémica surgida tras el envío de un escrito remitido por el grupo municipal VOX en el que solicitan la retirada inmediata de la “bandera gay” del balcón de la fachada del Ayuntamiento, colocada con motivo de la celebración de semana la Declaración Universal de los Derechos Humanos, tal como se han colocado en innumerables organismos e instituciones, para dar visibilidad especial a los derechos LGTBIQ y mostrar apoyo a las personas que aún siguen padeciendo situaciones de acoso y discriminación por este motivo.

En su escrito, Antonio Gómez, portavoz municipal de VOX, señala que “este hecho atenta directamente contra la ley de banderas, contra el deber de objetividad y neutralidad de las administraciones públicas”.

Por su parte, la regidora (PP), señala en su comunicado que se trata de una “llamativa y lamentable polémica”, no habiéndose “contravenido ningún tipo de legislación vigente”.

Muy al contrario, Natalia Quintana, explica que “como es bien conocido por todos los vecinos del municipio, el balcón del Ayuntamiento de El Álamo es un icono de repercusión pública en los ámbitos sociales y culturales, pero más aún en una reivindicación social. Por tal motivo, cada año prende como faldón de este balcón y no como bandera oficial, la insinia del colectivo LGTBIQ+.

En ese mismo sentido, la regidora, enumera en su comunicado, distintas banderolas y faldones que ondean en el balcón del Ayuntamiento en diferentes ocasiones como, entre las más recientes, el apoyo a Ucrania, la felicitación deportiva al Club Deportivo El Álamo, la lucha contra el cáncer, o el agradecimiento a la población durante los peores meses de la pandemia por Covid-19.

Asimismo, en el comunicado, la alcaldesa invita “a aquellos que afirman que el equipo de Gobierno ha contravenido la ley y nos acusan de prevaricaciones, que traten de leer la jurisprudencia existente [… ] por la que la ley afirma que la posibilidad de colocar pancartas o banderas conmemorativas en los Ayuntamientos de forma no permanente es una competencia que se ampara en el principio de autonomía local, sin que una pancarta pueda asimilarse a una bandera, que tampoco estaría prohibida siempre que no trate de símbolos contrarios a los valores constitucionales.”

Por ello, el comunicado concluye que “respecto a su petición de retirar la pancarta actual, solo en esta ocasión en no en las anteriores, se pueden reflejar presuntos motivos de homofobia.”