Vivir como en Finlandia

Vivir como en Finlandia

 

En Finlandia hace mucho frío. La temporada invernal se inicia en noviembre y se prolonga durante cinco meses en los que la temperatura oscila entre los 10 y los 20 grados bajo cero durante el día, y alcanza fácilmente los 30 bajo cero durante la noche. Pero la gente no pasa frío en sus casas. Tienen buenos sistemas para mantener el calor del hogar, y la factura de la calefacción apenas supera los 10 euros al mes, a lo que hay que sumar otros diez, aproximadamente, de electricidad. Nada que ver con lo que tenemos en España, donde pagamos uno de los recibos energéticos más caros de Europa por culpa de la cantidad de impuestos con los que nos gravan.

En nuestro país, si tenemos contratada una potencia de 5,5 Kilovatios y hacemos un consumo de 21 Kilovatios en un mes, el coste de lo que hemos gastado será de 3,25 euros, pero, sin embargo, nuestra factura alcanzará los 31,18 euros. Y ese puede ser un consumo razonable para nuestros cálidos meses de verano, pero se multiplicará fácilmente por cuatro o por cinco con la llegada del invierno.

¿Por qué los españoles pagamos tanto por la energía y los finlandeses tan poco? Porque en España, entre el 60 y el 70 % del importe de nuestra factura son impuestos y peajes, al margen de nuestro consumo real. El gobierno subvenciona con nuestros impuestos el carbón y las energías renovables, que son deficitarias. Y no tenemos energía nuclear. La que necesitamos se la compramos a Francia y, además, pagamos por la eliminación de los residuos. En Finlandia cuentan con cuatro plantas nucleares que generan el 27 % de la electricidad que consumen, y llegará al 40 % cuando entre en servicio la quinta central.

Y que nuestro recibo de la luz venga cargado de impuestos no impide que el atraco fiscal sea también exagerado en otra tasas, como el IVA, el IRPF, el Impuesto de Sociedades, el de Sucesiones, Transmisiones o Patrimonio.

También en Finlandia se pagan unos elevados impuestos, entre un 30 y un 58 %, pero allí, los salarios son mucho más altos. Un maestro cobra entre 3.000 y 4.000 euros al mes. Aquí en España, pocos son los profesores que superan los 2.000 euros y en impuestos pagarán entre un 30 y un 45 %.

Pagar muchos impuestos nunca es agradable. Pero resulta razonable si lo que obtenemos a cambio es satisfactorio. En los países nórdicos pagan elevadas tasas, pero tienen salarios altos y reciben contraprestaciones en ayudas a la maternidad, universidad, empresas, pensiones… y apenas existe corrupción. Aquí en España, tenemos mucho que aprender. Entre otras cosas, que la política debe estar al servicio de los ciudadanos, y no al revés.

Visto 1094 veces

Más en esta categoría:

Go to top
JSN Time 2 is designed by JoomlaShine.com | powered by JSN Sun Framework